Finalmente el grito explotò
en medio del mar
todo se convirtio
en particulas flotantes
que navegarian sobre el mar..
eternamente.
Asi, inquietud, espanto, aprension
miedo, mentiras, se esfumaron
En la suave cancion
de nuestra alma
nos unio el abrazo
de nuestro amor
sin contactar
con nada mas..
Jugamos
con el nombre de Dios
El "yo" de èl
nos bendijo para siempre
en nombre de las aves,
y todas las estrellas,
para nombrarnos dueños
de vientos, tierras y mares
inevitables.
Por eso Amor
en la brisa siempre viaja
nuestra cancion
de hadas, peces,
reyes del agua y sirenas.
picamiel
agosto 2008
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